Mendaz

- lunes, octubre 08, 2018

- Algunas películas de Disney han influido en el comportamiento de las generaciones que las han visto y no creo que haya sido para bien.

- Si no pones un ejemplo...

- Hay varias, pero en la de la marioneta Pinocho dejan caer, como si nada, que las reglas que hay que cumplir no son para todos, la élite queda exenta.

- Pues ahora mismo no me acuerdo de a qué te refieres.

- El Hada Azul que dá la vida a Pinocho le advierte que solo le convertirá en un niño de verdad si demuestra ser valiente, generoso, honrado y altruista. Pero resulta que a Pinocho le seduce el lado oscuro y según cobra vida, se va de parranda con un par de amigos y acaba en una prisión. Y aquí debía de haber acabado la historia, no cumple con lo pactado y deberá asumir las consecuencias.

- Pero no acaba así.

- No, si acabara así sería coherente, pero es Disney, así que aparece de nuevo el Hada Azul y le libera, bajo la condición de que se porte bien y además le asegura que no volverá a ayudarle.

- Le echa una mano, todos nos merecemos una segunda oportunidad.

- Esa frase es tan mendaz que me ha parecido ver cómo te ha crecido la nariz Rubén. En fin, una vez liberado, Pinocho vuelve a irse de juerga porque es lo que realmente le mola, pero esta vez en plan extreme, drogas, alcohol y juego y claro, la cosa acaba tan mal que después de varias piruetas argumentales, que incluyen a Pinocho salvando la vida de su padre, a cambio la pierde, en definitiva, que se muere.

- Menudo final.

- Nuevamente coherente, Pinocho la palma, pero oye, todos la palmamos y mejor dejar el estandarte bien alto, hizo lo que quiso y dejó demostrado que se puede vivir conforme a tus propias reglas y aún así hacer algo realmente bueno.

- Pero sigue siendo Disney...

- Exacto, así que ahora viene lo mejor, antes de que te dé tiempo a pensar que le dén al Hada Azul, aparece la muy mentirosa, e incapaz de cumplir sus propias promesas, no solo le devuelve a la vida, sino que lo convierte en un niño de verdad. Hace exactamente lo contrario de lo que aseguró que iba a hacer, regresa nuevamente a ayudarle aunque dijo que no lo haría y le convierte en un niño aunque Pinocho hay vivido como el Darth Vader de las marionetas de madera.

- Jope elisenda, visto así es un poco fuerte.

- Pues no hay otra forma de verlo, la primera que se pasa por el forro sus propias reglas es el Hada Azul, menudo ejemplo para los niños.

- Ahora tiene mucho sentido que Pinocho sea una marioneta.

- Sí, lo es en manos del Hada Azul, que por lo visto no va a descansar hasta que el chaval haga lo que ella quiera, y no lo que ella realmente hace.

- Haz lo que digo y no lo que hago.

- Esa sería una buena sinopsis.

- ¿De la película?

- También.