Roquedal

- Rubén, tenemos que pasar por la bicicletería y dejar mi bici en boxes, va a ir el del aillu a challar las bicicletas con vino de rioja y ñame.

- De paso podíamos comprar una caramañola de silicona, porque la mía está chuchurría.

- No es verdad, lo que pasa es que te encanta ir a la última con la parafernalia ciclista.

- Pero sale más barato que cuando vas al autolote, no sé cuantos cubre-parabrisas tienes, solo puedes usar uno y si aparcas bajo la encina o el ipil, ni siquiera te hace falta.

- Tienes razón, pero es porque quería completar la colección de fotos de animales, tenía los agapornis, el jerbo y el cocuyo, pero me faltaba el toro zaíno.

- ¿Y lo de los botiquines para el coche? eso sí que es una manía.

- Ayer mismo me puse una tirita con yoduro de povidona para la herida de la pantorrilla que me hice con el pedal.

- Ni que te fueras a quedar exangüe como si tuvieras melanuria por semejante lesión.

- Aunque no lo creas sufrí mucho, la rueda resbaló cuesta abajo por los detritus del camino y acabé cayendo en un roquedal perlado de cardos.

- Si te creo, pero cuando quieres eres la pichichi del drama, es una exageración que te den una sesión de digitopuntura por esa caída.

- Pues me alivió el dolor del torso, no fue solo un capricho, o al menos no como el de comprarte un astrolabio, que ya me dirás para qué lo quieres.

- Puede ser útil dondequiera que vayamos, no sé... cuando naveguemos por el humedal para ver los somormujos.

- Rectifico entonces... ya me dirás para qué lo necesitas.

- Bueno, pues para lo mismo que necesitas tú que hagamos un resumen con las palabras del día de cada mes.

- Touché.

Palabra del día:
roquedal
1. m. Lugar abundante en rocas.
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